Fan Fics Tokio Hotel

Capitulo 1, "Queriendo escapar… encontré mi hogar" By BlueRose

Titulo: "Queriendo escapar… encontré mi hogar"
Autora: *BlueRose*
Genero: Romantico, con un poco de drama.

Personajes:
Principales:
-Leticia y Bill K. – pareja principal.
-Carolina y Tom K. – pareja secundaria Secundarios:
-Gustav e Ilse- pareja
-Georg y Karina- pareja.
-Andreas y Joseline- pareja.
-Cindy
Terciarios:
-Carlos
-Eduardo
-Padres de Leticia
-Padres de Carolina
Otros:
-Madre superiora
-Salvavidas.

Mi Mensaje: Holaa!!^^ pues espero y les guste mi fic, lo estoy haciendo con mucho cariño, bueno mas bien arreglando y pues nada, ^^ Se cuidan!! Besitoss *BlueRose*wh’.



Capitulo 1

Todo comenzó cuando estaba pasando por una de las etapas más difíciles de mi vida, una chica normal, como todas, mis padres se habían separado cuando yo era muy pequeña, mi padre siempre estaba viajando, así que no crecí con una figura paterna, por lo que siempre me refugie en las relaciones que tenía con mis novios. Mamá siempre cuidaba de mí, aun que tarde o temprano siempre terminábamos peleando. Normalmente escuchaba rock, cosa que a mi madre no le agradaba del todo, hasta que llegó el día que el vaso se derramó.

Mi madre furiosa, llegó y tiro por la ventana mi aparato de sonido, yo estaba que no cabía aparte de la rabia de la sorpresa, ver una de las pocas cosas, que había aceptado de mi padre, volando hacía el jardín delantero.

-Pero que chingados te pasa!?- le grité
-Estoy harta!!, Estoy harta de todo!!, de ti!!, de tu música!!, de los problemas!!, de todo!!- no la iba a soportar.
-Sal de mi cuarto- le ordené
-Tu cuarto?, jajaja, tu cuarto?, te recuerdo que tu cuarto esta en MI casa, así que la que tiene que salir de aquí eres tu, no yo- eso había sido una indirecta muy directa, me había corrido de SU casa, perfecto, salió de MI cuarto dando un ruidoso portazo.

En cuanto mi querida madre salió, alance mis maletas y comencé a empacar, no me iba a quedar en si casa para que me insultara, si era mi madre y yo la adoraba porque en realidad la quería mucho, pero tenía demasiado orgullo como para dejar que lo pisotearan, aun si se trataba de mi propia madre. Así que cuando hube terminado de poner todas mis cosas en orden, llamé un taxi y lo esperé fuera de mi casa con mis maletas, no había agarrado todas mis cosas, pero algo era algo.

Le indiqué la dirección al taxista y esperé hasta llegar a mi destino, la casa de mi amado Carlos, llegué, me baje entusiasmada y le dije al taxista que me esperara que en un momento bajaba por mis maletas, subí el edificio y cuando abrí la puerta. Todo pasó demasiado rápido, vi su ropa tirada por toda la sala, y no solamente la suya, sino también ropa FEMENINA, escuché gritos… de placer?, dios mío!!, mi mundo se derrumbó en ese mismo instante, cerré la puerta nuevamente, despacio, muy despacio me trague las lagrimas que querían salir, no iba a llorar, baje como pude de nuevo y me subí al taxi, el chofer me vio extraño.

-Al aeropuerto, por favor- fue lo único que pude decir, en pocos minutos me encontraba frente a las oficinas donde comprabas los boletos.
-Buenas noches Señorita- me dijo la joven empleada
-Buenas noches- respondí secamente- un boleto para el siguiente vuelo, por favor
-No importa el destino?- cuestiono
-No.- respondí secamente
-El siguiente avión es para Hamburgo, su nombre por favor
-Leticia Altamirano.
-Edad- me cuestiono levantando una ceja, como no creyendo la respuesta que le daría
-18
-Puedo ver su credencial de elector?- a regañadientes la saque de mi bolsa y se la tendí así como mi pasaporte y mi visa- asintió simplemente cuando las observo y reviso cuidadosamente y me las devolvió- pagara con tarjeta o en efectivo?- genial, ahora no traía efectivo, así que tendría que usar una de las tarjetas que mi padre me había dado y que el mensualmente depositaba dinero, pero que claramente yo nunca había usado.
-Tarjeta- se la tendí y minutos mas tarde estaba en la sala de espera, 15 minutos para mi vuelo, sabía que debía avisar a alguien, Caro, por su puesto como no lo había pensado, me apresure y saque mi celular y marque ese número que me sabía mas que de memoria.

Un timbre, dos… tres, cuatro…, buzón

-Caro, cariño, primero que nada relájate y no te preocupes ok?, estoy por salir de la ciudad, bueno mejor dicho del país, pasaron una serie de acontecimientos poco agradables para mi, ay esta bien ya lo soltare mi madre me corrió de la casa y cuando fui a buscar a Carlos me lo encontré con otra tipa así que te llamaré cuando llegue a Alemania, besitos, te quiero tonta- y colgué, wow!! Siempre yo con mi gran tacto para decir las cosas, pero era mejor decirlo de una vez por todas, sentía mis ojos rojos, pero yo misma me impedía el llorar, no iba a llorar frente a nadie, no me lo permitiría me verían débil.

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Cuando llegué a Hamburgo, la verdad si me sentía devastada, me sentía utilizada, desde cuanto tiempo atrás me habría puesto el cuerno y yo como tonta sin darme cuenta?, no podía soportar, simplemente no.
Escuche fuertes gritos, había muchas adolescentes con pancartas y cosas que la verdad no me moleste en leer, y pronto llegué al área de taxis y subí mis maletas con ayuda del chofer, pronto me llevó a un hotel cerca del centro.

Cuando ya me encontraba en mi habitación, de una de las maletas saqué unos pantalones de tubo, una blusa negra de seda que tenía un lindo escote unos zapatos bajos negros y mi maquillaje, esa noche saldría no me quedaría a llorar, de hecho no había llorado y creo que eso me hacía mucho más daño que cualquier otra cosa porque no dejaba salir el dolor.

Salí de la bañera, me vestí y maquille, abrí la puerta corrediza del balcón para comprobarla temperatura y era demasiado frío para mi así que cerré la puerta de inmediato, sin duda el clima seria un grave problema para mí, de llegar de una ciudad que era extremadamente calida con veranos de 48° C, a una ciudad extremadamente fría, era un gran cambio.

Salí del hotel ahora enfundada en una gran chamarra, y comencé a caminar para conocer un poco la ciudad, minutos más tarde me tope con un club con karaoke, genial pensé, entre y me senté en una de las mesas del centro, por lo menos me reiría de los tontos que se pusieran a cantar, sin demorar ni un solo minuto se acercó un camarero.

-Buenas noches, señorita- saludó amablemente
-Buenas noches- respondí
-Gusta algo de tomar, de comer, algún aperitivo?
-Algo de beber, lo más fuerte que tenga
-Penas del corazón?
-Solamente traiga la bebida, por favor- el chico asintió y momentos después llego con dos vasos llenos
-Se que me pedirá otro así que aquí esta, que lo disfrute- y se retiró, estaba una tipa cantando, si es que a eso se le puede decir cantar y yo comencé a beber y a beber, y sin darme cuenta ya me había acabado los dos vasos y me encontraba frente al muchacho del karaoke tendiéndole mi ipod y señalándole una canción, el chico me miró extrañamente, pero finalmente acepto y yo me coloqué frente a las personas del club, muchos me aplaudieron o eso logró recordar.

Note como comenzaba la canción.

Y comencé a cantar, sin duda era la única de ese genero que tenía y solamente la pista.

Le bajé las estrellas, de un solo golpe,
Tal vez ese fue mi error,
Le ofrecí cada día, y cada noche, el alma y el corazón,
Pero no le bastó, no fue suficiente,
No quiso quererme como la quise yo.

Mis ojos me ardían cada ves más y los presentes me tomaban demasiada atención para mi gusto, pero necesitaba sacarlo todo.

Qué voy a hacer con todo este amor,
Que no cabe en mi pecho
Que me cala los huesos,
Que se ahoga en este mar de dolor.

Sentía como me temblaban las piernas, pero no era momento para derrumbarme no ahora había soportado demasiado como para no soportar unos minutos más.

Que me quema la carne,
Y que me hierve la sangre,
Que me está partiendo en dos la razón,
Qué voy a hacer sin su amor,
Qué voy a hacer con mi amor.

Genial, ya podía sentir como mis mejillas estaban cubiertas de un calido líquido proveniente de mis ojos, genial, genial, genial estaba llorando.

Se alejó de mi vida, de un solo golpe,
Se fue sin decirme adiós,
Me rompió la sonrisa, las ilusiones, el alma y el corazón,
Le dí todo mi amor, y no fue suficiente,
No quiso quererme como la quise yo.

Pero aún así no podía dejar de pensar en él, mi vista estaba demasiado nublada, no podía ver nada y me sentía demasiado mareada, sin fuerzas y sin más caí tendida en el mini escenario.

Sentí como me levantaba y tomaban en brazos, debería ser un ángel mi ángel salvador, no podía distinguir su rostro, yo seguía llorando, escuchaba voces, y como me subían dentro de un auto.

Pronto llegamos al destino, porque volvió a tomarme en brazos y en pocos minutos me estaba dejando sobre una cómoda cama, me quitaba unos cuantos mechones de cabello de la cara.

No quería que se fuera, entre mi claridad y la oscuridad de mi mente, tome su rostro entre mis manos y lo acerqué y sin pensarlo dos veces lo bese, beso que el al principio devolvió, pero posteriormente se alejó de mi como si quemara, y salió de la habitación.

Pronto caí en un profundo sueño, quién habría sido mi salvador?, no sabía su nombre de hecho no sabía nada de él. Sería buena persona?, o tal ves un psicópata? ...

Continuara...